Ayer era inteligente, por lo que quería cambiar el mundo. Hoy soy sabio, por lo que me quiero cambiar a mi mismo.
El corazón del hombre es un instrumento musical, contiene una música grandiosa. Dormida, pero está allí, esperando el momento apropiado para ser interpretada, expresada, cantada, danzada. Y es a través del amor que el momento llega.
Tu tarea no es buscar el amor, sino buscar y encontrar las barreras dentro de ti mismo que has construido contra el.
Hay una canasta de pan fresco en tu cabeza y aún así vas de puerta en puerta pidiendo cortezas.
¿Cómo puede haber cansancio cuando está presente la pasión? Oh, no suspires con pesadez por la fatiga: ¡Busca la pasión, búscala, búscala!
¿Por qué estas tan encantado con este mundo cuando una mina de oro late en tu interior?
¿Quién se levanta temprano para descubrir el momento en que comienza la luz?
En tu luz aprendo cómo amar. En tu belleza cómo hacer poemas. Bailas dentro de mi pecho, donde nadie te ve, pero a veces yo lo hago y esa luz se convierte en este arte.
No te aflijas, cualquier cosa que pierdes vuelve de otra forma.
Mi alma es de otro lugar, estoy seguro de eso, y tengo la intención de terminar allí.