Siempre he dicho que mis jugadores son los mejores del mundo: lo he he hecho cuando entrenaba a un equipo pequeño como el Oporto, cuando estaba en el Chelsea. Ahora los mejores del mundo son los futbolistas del Inter.
He estudiado italiano cinco horas al día durante varios meses para asegurarme que podría comunicarme con los jugadores, la prensa y los aficionados. Ranieri ha estado cinco años en Inglaterra y todavía lucha para decir buenos días o buenas tardes.
Me han preguntado si he visto el partido de la Juve, y he dicho que lo he visto hasta el gol de Amauri y después lo hemos dejado de ver, ya que había calamares para cenar.
¿Habéis visto las ocasiones de gol que hemos tenido y nuestro dominio en campo? Podíamos haber ganado 5-1 conmigo de portero
Para mi la pelota era como un diamante: un diamante no te lo quitas de encima, lo ofreces.