Está bien celebrar el éxito, pero es más importante tener en cuenta las lecciones del fracaso.
Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Este sí que no tendrá vocación docente ni la paciencia requerida.
Dedicarse a servir cervezas o llevar pizzas no te quita dignidad. Tus abuelos lo llamaban de otra forma: Oportunidad.
Tenga un criterio de calidad. Algunas personas no están acostumbradas a un entorno en el que se espera la excelencia.
Cuando se innova, se corre el riesgo de cometer errores. Es mejor admitirlo rápidamente y continuar con otra innovación.
Si algo no está bien, no basta con ignorarlo y prometer que ya se arreglará más tarde. Eso es lo que hacen otras compañías.
Es mejor ser pirata que alistarse en la marina.
No ganarás 5.000 euros mensuales justo después de salir de la universidad, y no serás vicepresidente de nada hasta que, con tu esfuerzo, te hayas ganado ambos logros.
La vida real no se divide en semestres, no tendrá largas vacaciones de verano, de pascua, de navidad, del patrón del colegio, puentes,etc. y pocos jefes se interesarán en ayudarte a que te encuentres a ti mismo. Todo eso tendrás que hacerlo en tu tiempo libre.
Continuad siempre hambrientos y alocados