Nuestro carácter es el resultado de nuestra conducta.
Todo lo que se llama estudiar y aprender no es otra cosa que recordar.
Ser profundamente amado te da fuerzas, mientras que amar profundamente a alguien te da coraje.
Lo que con mucho trabajo se adquiere, más se ama.
Teme a la vejez, pues nunca viene sola.
Sin no conoces todavía la vida, ¿cómo puede ser posible conocer la muerte?
La mente siempre tiene razón, mientras que el apetito y la imaginación pueden equivocarse.
¡El que sabe contentarse con lo que tiene siempre estará feliz!
Aquel que gobierna por medio de su excelencia moral puede compararse a la estrella polar, que permanece en su sitio en tanto todas las demás estrellas se inclinan ante ella.
Los buenos guerreros hacen que los adversarios vengan a ellos, y de ningún modo se dejan atraer fuera de su fortaleza.