Salí de Brasil dispuesto a crecer como jugador y como hombre. Quería aprender de todo, conocerlo todo. Así que cada día que pasa aprendo algo nuevo.
Cuando juega sin presión, Messi se aburre.
La música es mi segunda pasión. Creo que si no fuera jugador me dedicaría a la música.
Todos los entrenadores hablan sobre movimiento, sobre correr mucho. Yo digo que no es necesario correr tanto. El fútbol es un juego que se juega con el cerebro. Debes estar en el lugar adecuado, en el momento adecuado, ni demasiado pronto ni demasiado tarde.
Juego para ser feliz y la gente que valore lo que tenga que valorar. Si valoran mi trabajo, encantado, si no, no pasa nada.
La polémica ha servido para motivarme.
Pase lo que pase, dirija quien dirija, todo el mundo sabe que la camiseta 10 de la selección será mía...Para siempre.
Al fútbol se juega con el cerebro
Sólo se nos recordará si ganamos, si no ganamos, todo esto quedará como un anécdota.
Llegar al área y no poder patear al arco es como bailar con tu hermana.